Coderas
Las coderas sirven para tratar las diferentes dolencias que pueden producirse en esta articulación tan importante. Dependiendo de la lesión seria recomendable usar una u otra codera. Existen Diferentes coderas para tratar el síndrome del codo de tenista, tendinitis, esguinces, artrosis, fisuras, irritaciones nerviosas.
Las coderas son una ortesis elástica y pasiva que utilizamos para limitar las flexiones del codo. Se utilizan habitualmente en procesos de rehabilitación realizar deporte. Generan calor, inmovilizan las articulaciones y previenen posibles traumatismos, como esguinces o dislocaciones.
CD300 Epigrip Plus Banda para epicondilitis
La codera para epicondilitis Epigrip Plus esta fabricada con una novedosa técnica llamada micro fusión que ayuda a evitar rozaduras y presiones en lugares no adecuados. Esta compuesta por un tejido técnico de alta resistencia y muy transpirable.
Se ajusta mediante una cincha inelástica y velcro. Es talla única.
Indicada para tratar: inflamación de la fascia muscular, epicondilitis (codo de tenista),epitrocleitis (codo de golfista).
CD15A NeoActiv Codera epicondilitis
La codera NeoActive para epicondilitis esta fabricada en tejido sintetico que genera calor terapéutico y actúa como relajante muscular. Esta disponible en las tallas: S, M, L, XL y XXL.
Indicada para: el cuidado y prevención de lesiones musculares, bursitis, alivio del dolor del codo reumático, inflamación de la fascia muscular, epicondilitis ("codo de tenista"), epitrocleitis ("codo de golfista"), en general, dolores de codo. Patologías y lesiones que requieran calor terapéutico antiálgico y compresión.
CD510 Ottec Codera para epicondilitis
Esta codera esta pensada para tratar la epicondilitis principalmente. Está fabricada en termotejido que aporta un soporte térmico en la zona afectada y siendo muy transpirable. Se ajusta mediante velcro, es talla unica y aumenta la protección, alivia el dolor, reduce y controla el edema y mejora de la sensación propioceptiva.
Indicada para tratar: epicondilitis (codo de tenista), epotrocleitis (codo de golfista) y epicondilopatía crónica o recidivante.